Si pensabas que IPONE es esa pequeña marca japonesa especializada en el aceite de 2 tiempos, ya es hora de actualizar vuestra cultura motera. Te vamos a hablar de uno de los principales fabricantes de lubricante específico para motocicleta.
La fábrica se ubica en Francia, muy cerca de Marsella, y no en la isla del sol naciente. IPONE, el fabricante de lubricante para moto lleva aquí desde sus inicios, hace algo más de treinta años. Fundada en 1985 por Christian Roberty, especialista en el pequeño mundo de la moto, la maca desea en cierta manera aprovechar con este nombre oriental la ola de éxito en la que cabalgan los constructores de motos japonesas de hoy. ¡y funcionó! La marca se hizo un hueco rápidamente entre las 2 tiempos, las 50 cc y OffRoad. ¿Te acuerdas del olor a fresa que dejaba el scooter al pasar? Ese inolvidable perfume se lo debes a IPONE. Hace tiempo que la gama se ha ampliado y cubre todas las necesidades de los moteros, sea cual sea su segmento favorito: deportivas, OffRoad, carretera, custom, en 2 y 4 tiempos.
La marca creció rápido. Un auge que debe en gran medida a su asociación con Yamaha en Francia. Al convertirse en el lubricante oficial de la marca de los diapasones a partir de 2003 en el país galo obtiene una visibilidad excepcional. Esto fue antes de que YamaLube, la marca de aceite propia de Yamaha, viera la luz. Sea como sea, IPONE ya es conocida ahora, ya que sus productos se exportan al menos a ¡¡cincuenta países!!
En cuanto al diferencial de IPONE con respecto a sus competidores, principalmente se debe a la pasión. La auténtica misión de IPONE no es vender aceite para motos, sino más bien hacer que la gente se aficione. Somos los primeros en utilizar nuestros productos, estamos continuamente intentando optimizarlos para que respondan al uso que le darán los moteros. La pasión por la moto es una de las principales motivaciones para los profesionales, y en IPONE no son una excepción.
Todas las operaciones de envasado se realizan in situ: los aceites, almacenados en cisternas alineadas fuera del edificio, circulan por una impresionante red de canalizaciones debidamente etiquetadas, que los conducen hasta las zonas de envasado. Por un lado el llenado de los famosos barriles de chapa marcados con el logotipo IPONE dirigidos a los profesionales, más bien básico (una válvula y un operario que realiza el llenado). Por el otro, una sofisticada cadena de envasado de los aceites dirigidos a los moteros que se ocupan personalmente de los cambios de aceite de su querida máquina. Todo está automatizado: llenado, sellado y etiquetado. A continuación se empaquetan los envases de cuatro, dos y un litro para ajuste de niveles o para 2 tiempos. Posteriormente se almacenan en el caso de que no se envíen directamente.
¿Y en cuanto a la fabricación? Las fórmulas se elaboran mano a mano con el químico para que los productos superen las normas en vigor en este campo (API – JASO). Un resultado difícil de alcanzar ya que el rendimiento del aceite debe ser estable en el tiempo, lo cual no es nada fácil. Cuando, tras muchas idas y vueltas, se estima que el producto es satisfactorio para las dos partes, empiezan las pruebas internas. En este contexto se eligió por ejemplo la fórmula final del Katana 100% sintético con Ester: el efecto de suavidad del cambio ha seducido por completo a los probadores (tanto profesionales como particulares) a los que acude la marca con regularidad antes de la comercialización. En definitiva, estamos muy lejos de los lubricantes genéricos a los que sólo hay que pegar una etiqueta.
Con el fin de alcanzar mayores estándares y cubrir las necesidades de todos los moteros, el año pasado se revisaron las 140 referencias de aceite. Por lo tanto, todo empieza con una buena documentación. Si te fijas, en las etiquetas de IPONE verás que la legibilidad prima sobre el aspecto de marketing. El objetivo del fabricante: que sepas con un vistazo cuál es el uso y la norma de tu aceite. Este último punto es efectivamente el único criterio de comparación válido entre productos competidores. Por eso, algunos productos nuevos tienen una incidencia muy apreciable en la experiencia del piloto, como el Katana anteriormente citado, que suaviza el cambio de marcha. Esto es, cuando el aceite juega un papel activo en el placer de conducir una moto.
Pero la última novedad es el CARELINE, la línea de productos para el cuidado de la moto. Tanto envases como contenido han sido revisados para ganar en eficacia y facilidad de uso. Respecto a las pruebas de desarrollo, tomamos como referencia el Spray para Cadenas X-TREM Chain, el producto insignia de este segmento: han sido necesarias muchas pruebas para obtener un producto que ofreciera el mejor agarre y durabilidad (800 kms) y para ello, tras las pruebas en banco ha habido que rodar. Pero el trabajo también implicaba la búsqueda de un envase spray lo suficientemente ancho para aplicar bien el lubricante sobre los eslabones y a la vez lo bastante preciso para no tener que tapar la llanta con un cartón gracias a su difusor innovador y práctico.
En definitiva, gracias a la calidad de sus productos, la pasión y la implicación del equipo, la marca brilla a nivel internacional. Y ahora, ¿sigues pensando en IPONE como otra marca más?